EN LA SELVA DE CEMENTO
En la selva de cemento
sobrevivo descontento
allí reina la malicia,
el crimen y la injusticia.
Reina el siniestro ratero
con su cuchillo de acero
también reina el abogado
del crimen organizado.
En la selva de cemento
el día a día es violento
se cometen extorsiones,
secuestros y violaciones.
De moda está el sicariato
y hoy se mata por contrato;
el malandro aterroriza,
quema vivo y descuartiza.
El malandro es más osado
porque lo han empoderado
el Congreso, el presidente
y la norma complaciente.
En la selva de cemento
el espíritu es sangriento
cualquiera que se arrebata
amenaza, grita y mata.
Luis Bárcena Giménez
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