TE CASASTE POR LA IGLESIA
Te casaste por la iglesia
y juraste amor eterno
e hiciste lo que tenías
anotado en tu cuaderno.
Cada domingo a las diez
te gustaba ir a misa
y regresabas del templo
cada vez más insumisa.
En nuestro cómodo hogar
aunque tenías tu rol
no lo ejecutabas porque
te ibas a pasear al «mol».
En nuestro cómodo hogar
fingías una jaqueca
y después aparecías
bailando en la discoteca.
Luis Bárcena Giménez
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario, se mostrará cuando sea aprobado.