TU EJEMPLO DE INGRATITUD
Apenas cambió tu estado
económico te fuiste
y de lejos me dijiste:
no recuerdo haberte amado.
Olvidaste que fui yo
el humano solidario
que de tu entorno precario
por amor te rescató.
Olvidaste que fui yo
el que te estuvo apoyando
dentro del hospital cuando
la enfermedad te atacó.
Olvidaste que por mí
conociste el bienestar
y que pudiste viajar
a Samoa y a Tahití.
Luis Bárcena Giménez
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario, se mostrará cuando sea aprobado.